El último fin de semana de mis vacaciones convencí a Antonio para que fuésemos a visitar Contadora... y lo cierto es que no opuso mucha resistencia... así que reservamos el ferry y un Bed & breakfast y nos dispusimos a pasar un agradable y soleado fin de semana. Contadora es una pequeña isla en el archipiélago de Las Perlas, en el Pacífico. Se llama así, porque es donde los españoles hacíamos recuento de las perlas encontradas durante la época colonial. Lo cierto es que me parece sorprendente que a tan poca distancia de Ciudad de Panamá (una hora y media en ferry aproximadamente) exista esta maravilla natural que nada tiene que envidiar a otras islas o playas del Mar Caribe. Las aguas y el clima son extremadamente cálidos, por lo que existen multitud de especies endémicas. Además, las ballenas jorobadas vienen aquí a enseñar a sus crías a nadar y bucear... y tuvimos la ocasión de verlo todo muy de cerca. Para muestra, un botón:
Las playas están llenas de cangrejillos y ermitaños. Lo que no podíamos esperar mientras tomábamos plácidamente el sol, es que de la nada apareciera esta iguana, que cazó un cangrejo ante nuestros ojos y se lo merendó en un periquete... luego, volvió a su casa como si nada...
También se pueden ver muchos tipos de aves, como la garcilla de la derecha o el pájaro de patas azules (si, no es un fallo de la cámara ni son pájaros radiactivos... ¡las patas son de color azul!) que, según nos dijeron, solo vive aquí y en Galápagos.
Lo mejor de todo, claro está, las ballenas jorobadas. Tuvimos la suerte de verlas muy, muy de cerca, pero no lo tenemos inmortalizado en vídeo. Estuvimos persiguiendo a una familia completa: papá, mamá y bebé, durante bastante rato y no parecían asustarse de nosotros. Aquí os dejo una de nuestras grabaciones:
Para movernos por la isla, alquilamos un cochecito de golf, que es lo único que ofrecen aquí ya que la isla entera tiene un perímetro de tan solo 8 km, según nos dijeron.
Gracias al cochecito, pudimos visitar todas las playas principales y explorar los alrededores. La isla tuvo una época de esplendor en los años 80, ya que había un resort de lujo (que ahora está completamente abandonado) e incluso el sah de Persia vivió aquí durante su exilio. Ahora mismo isla Contadora cuenta con hostales, B&b, algún hotel de 3 estrellas y poca oferta gastronómica si lo que quieres es quedarte más de una semana. Ahora sí, si lo que deseas es desconectarte del mundo, creemos que es un sitio perfecto para pasar de 2 a 7 días. Más tiempo, supongo que podría resultar claustrofóbico.
Por cierto, adivinad de quién nos acordarmos muchísimo estando en la playa...
Y es que ya empieza a hacerse dura la separación... pero bueno, en un mes escaso estamos recogiéndolo... ¡¡¡ayyyy!!! ¡¡¡qué ganas de verlo ya!!!
Aquí os dejo otras fotos de las distintas playas en las que nos relajamos y tomamos el sol (las consecuencias las estoy sufriendo ahora mientras me despellejo cual lagarto... y eso que usé bloqueador):
Este sábado partimos rumbo a Sao Paulo, en Brasil, donde estaremos hasta el sábado que viene. Será mi último viaje en Latinoamérica antes de volver a casa, aunque no el de Antonio... que ahora mismo está en Perú y que tiene aún que viajar a Brasil, Atenas (sí, si, en Europa), Colombia y Ecuador... Este hombre no para quieto...
Seguiremos informando :-)
Tiene que ser una pasada! Con que convencerlo, eh? Llévame a mi la próxima vez, ja, ja, besos!
ResponderEliminar